ENTENDIMIENTO EN SÍ y ENTENDIMIENTO HUMANO

Ante del problema de si nuestro conocimiento pasa necesariamente por el convertere ad phantasmata; ¿cómo es posible algún conocimiento de Dios acerca del cual no tenemos ninguna imagen? Santo Tomás responde:
1º) El entendimiento en sí es inmaterial. Su tendencia intrínseca es la aprehensión del ser en toda su extensión. El entendimiento está dirigido al ser. Considerado en sí mismo hay que admitir que su objeto PRIMARIO es el ser.
2º) El movimiento natural del entendimiento es hacia el ser en su totalidad. No hacia el ser sensible. Lo que sucede es que, en cuanto entendimiento humano, tiene que partir del ser sensible.
3º) Pero si dentro de las cosas sensibles, el entendimiento puede descubrir las esencias ello se debe a que estas participan del ser y a que el entendimiento tiende por naturaleza al ser.
4º) En este contexto es donde hay que situar la respuesta al problema planteado anteriormente: Dios es el Ser que se manifiesta en lo sensible como aquello que es creado a su imagen y semejanza. Ello permite un saber acerca del Ser que, sin duda será imperfecto y análogo, pero saber, después de todo.

Aquino